Colesterol alto ¿qué podemos combatirlo?
Desde que somos pequeños se nos anima a llevar una vida sana y saludable, equilibrada, donde hagamos deporte y nos mantengamos en forma, así como a la hora de comer, optemos por alimentos sanos y nutritivos. Sin embargo, el mundo de hoy en día parece empujarnos en sentido contrario. La gente trabaja y tiene que ocuparse de un montón de asuntos, así que en muchos casos no tenemos tanto tiempo para hacer deporte, y si lo tenemos, debemos sacrificar el estar con nuestra pareja o nuestra familia, o hacer cualquier otro tipo de actividad de tiempo libre, como leer o ver series. Con la comida pasa exactamente igual, todo el mundo quiere comer sano, pero pocos tienen tiempo para ir a comprar y preparar platos bien hechos. La mayoría sencillamente buscan algo precocinado o comen fuera, por lo que su dieta no es la más recomendable.
Y es que cuando uno lleva un estilo de vida poco saludable, los problemas no tardan en aparecer. Desde el sobrepeso, algo bastante obvio y que a nadie le gusta tener, hasta problemas más graves derivados de todo ellos, como los vasculares. Una mala alimentación puede producir niveles altos en sangre de colesterol, glucosa y otros compuestos que, en su justa medida son sanos y positivos para nuestro organismo, pero que si los tomamos demasiado pueden hacernos la vida muy complicada. Hoy por hoy, con tantas personas con sobrepeso que además no intentan siquiera cambiar su modo o estilo de vida por otra más saludable, el problema del colesterol alto es cada vez más habitual. Por eso nosotros hemos querido tratarlo en este artículo, para hacerte entender que tiene una solución sencilla, antes de que sea demasiado tarde.
Qué es el colesterol
Llamamos colesterol a la sustancia de tipo ceroso que viajan por todo nuestro organismo a través de la sangre, y que son utilizadas por nuestro cuerpo para crear células nuevas. Este tipo de sustancia viaja pegada a las proteínas, en forma de lipoproteína, y podemos encontrar dos tipos principales, la de alta densidad, o buena, y la de baja densidad, o mala. Esta última es la que debería preocuparnos, puesto que es el colesterol que viaja por todo el cuerpo y puede llegar a quedarse aglutinado en ciertas paredes arteriales, hasta provocarnos problemas basculares si no lo evitamos. El colesterol “bueno” se encarga de recoger todo el exceso de colesterol y llevarlo al hígado para que pueda ser expulsado del cuerpo, como algo sobrante.
Qué causa tener el colesterol alto
Lo preocupante es tener el colesterol malo alto, es decir, un nivel demasiado elevado de Lipoproteínas de baja densidad. Esto se da normalmente por una mala alimentación, con alimentos ricos en grasas saturadas, con exceso de azúcar o de otros componentes que no son tan necesarios para el cuerpo y que por tanto, tienden a acumularse en el organismo, en forma de grasa arterial por ejemplo. La comida procesada, el exceso de carne animal, las salsas o los refrescos con mucho azúcar son la principal fuente para el colesterol alto. De la misma manera, llevar una vida sedentaria, sin apenas hacer deporte, también nos afectará negativamente en este caso.
Cuando realizamos alguna actividad física obligamos a nuestro cuerpo a tirar en muchas ocasiones de su reserva, para potenciar nuestro ejercicio, y de esa forma eliminamos el exceso de grasa que podamos tener, limpiando también nuestra sangre de esos depósitos tan preocupantes de colesterol malo. El tabaquismo es también otro factor de riesgo que aumenta normalmente el colesterol en nuestra sangre, de la misma forma que lo hace la obesidad, que al fin y al cabo es una consecuencia de lo anteriormente mostrado, mala alimentación y poco ejercicio. También existe cierta parte de herencia genética en el peligro a sufrir un colesterol alto, pero es un porcentaje ínfimo que incluso se puede reducir si llevamos una vida sana y equilibrada.
Riesgos para nuestra salud
Los riesgos para nuestra salud son evidentes cuando tenemos estos niveles de lipoproteínas de baja densidad demasiado altos. Este tipo de sustancia suele pegarse a las paredes arteriales, de forma que crean depósitos cada vez más grandes que van estrechando dichas arterias, y provocando, por tanto, problemas en la circulación de la sangre. Estos problemas, si no se frenan, se pueden hacer mucho más graves, complicándolo todo con posibles ataques al corazón e infartos, además de afectar a nuestra movilidad en general, a la propia calidad de la sangre, a la salud de nuestro cuerpo completo. Todo ello por no comer adecuadamente, pudiendo resolver la situación de una manera muy sencilla, como veremos a continuación.
¿Cómo podemos combatir el colesterol alto?
Las principales causas para tener el colesterol alto vienen de una mala alimentación y un estilo de vida sedentario, sin hacer ejercicio, bajo de forma. Por lo tanto, remediar el problema es tan sencillo como cambiar dicho estilo de vida por uno más sano, más equilibrado, donde comamos de una manera más saludable, productos como las frutas y verduras, la carne y los lácteos, todo en su justa medida. Así no solo estaremos evitando el exceso de colesterol malo, sino que además estaremos ayudando al cuerpo a eliminarlo a través del colesterol bueno, el de las lipoproteínas de alta densidad. En cuanto al ejercicio, bastará con salir a caminar varis veces por semana, o incluso a correr, si podemos, parar rebajar el peligro.
Dejar el alcohol y el tabaco suele ser también una opción maravillosa para evitar riesgos porque como ya hemos visto, suponen factores importantes para la aparición y el desarrollo de este colesterol malo. Tomar conciencia del peligro que supone eso y alejarnos lo máximo posible de ese mal estilo de vida será la mejor alternativa para evitar sufrir por este truculento problema. Todo esto repercutirá para bien en nuestra salud y en nuestra forma de vida, que será mucho más sana y equilibrada, notándolo enseguida y sintiéndonos mejor con nosotros mismos.